La palabra “wedding planner” en nuestro medio tiene una vida muy corta. Su traducción literal es planificador de bodas, pero y eso, ¿qué significa? ¿Cuál es la diferencia entre lo que hace un wedding planner y una empresa que me da un paquete “todo incluido”? Si el wedding planner me ayuda con toda la planificación, ¿por qué no me envía una cotización con lo que necesito para mi boda? ¿Para qué necesito un wedding planner si estamos organizando nosotros mismo nuestra boda? Estas son algunas de las interrogantes con la que me he topado en estos 6 años de trabajar como planificadora de bodas y eventos.
Para responder a todas estas interrogantes, basta con una sola pregunta más que yo les hago a ustedes, los novios: ¿son ustedes iguales a otra pareja? Y la respuesta, obviamente, es no. Y es ahí donde entra el valor real del wedding planner ya que su misión es entender la individualidad de cada pareja y ayudarlos, de una forma profesional y coherente, a que esa individualidad, esa esencia tan propia de cada persona, se refleje en el día más importante de sus vidas.
Hoy les comparto los tres aspectos fundamentales mediante los que podrán apreciar el valor real de contar con un wedding planner y vean el porqué van a querer tenernos al mando de un día tan especial como es su boda:
EDUCACIÓN & FORMACIÓN
Estás en manos de un profesional, en todo el sentido de la palabra. Los wedding (como nos denominamos a nosotros mismos) hemos estudiado para hacer lo que hacemos, nos capacitamos constantemente e incluso algunos nos hemos certificado en instituciones reconocidas a nivel mundial para poder ejercer nuestra profesión en cualquier país. Al contratar un wedding, ustedes se benefician de todo ese conocimiento adquirido, no solo en ejecución de bodas sino también de conocer lo último en tendencias sobre decoración, catering, diseño, lo que influenciará directamente en el look y estilo de su boda. Esta educación continua nos permite estar en contacto con otros proveedores de bodas que también valoran el conocimiento y así armar una red de proveedores serios y con estándares de calidad excelentes. Al buscar la asesoría de un wedding estás buscando lo mejor para tu gran día y estás dándole a este día su justo valor. Con sentarte una hora con un wedding a tomar un café, vas a ver de lo que te estoy hablando. Pregúntale sobre su formación y cómo llegó a ser wedding planner. Nos encanta conversar de nuestra pasión que son las bodas, así que más de uno va a estar feliz de poder compartir contigo parte de su vida.
EXPERIENCIA & PROFESIONALISMO
Dicen por ahí que la práctica hace al maestro. Lo mismo sucede con un wedding planner. Mientras más bodas o eventos tenga a sus espaldas, más preparado estará para atender a tus necesidades y exigencias. Adicionalmente, la experiencia junto con la formación, son tremendamente útiles para tener planes de contingencia listos en caso emergencias, algo que seguramente no se les ha pasado por la cabeza. ¿Y si le pasa algo al padre en su camino a la iglesia? Plantear los peores escenarios es parte de la planificación porque nos permite estar preparados. El profesionalismo se ve en cómo trabaja el wedding planner durante la planificación de tu boda. Desde la firma de un contrato de servicios con los novios hasta las herramientas que utiliza para diagramar planos de montaje o asignar asientos. Recuerda, somos profesionales de la industria de las bodas, nuestro negocio es planificar bodas en serio, por eso tratamos a nuestros clientes con el profesionalismo y seriedad que se merecen.
CONTACTOS & PROVEEDORES
El mundo de las bodas es muy dinámico. En estos 6 años de vida hemos visto un crecimiento inmenso en la cantidad de proveedores de servicios para bodas. Siempre existirán los proveedores “top of mind”, los más conocidos y demandados, pero también es bueno dar una oportunidad a aquellos que están empezando y tienen un potencial inmenso en sus manos. Sobre todo en aquellas ocasiones en que los novios son más alternativos, nada clásicos y buscan algo diferente para su gran día. El wedding planner tiene el beneficio de conocerlos ya que son ellos quienes nos buscan para que podamos ofrecer sus servicios a las parejas que van a casarse. Al estar metidos de cabeza en este mundo, sabemos quién es quién, el famoso “who is who” en la industria, sus pros y contras. Este contacto constante con ellos nos permite conocer su forma de trabajo y muchas veces, negociar tarifas preferenciales de sus productos o servicios, beneficio que se traslada a los novios. Entonces, el valor real del wedding planner en este caso es poder recomendarte a los proveedores que pueden cumplir con lo que necesitamos para que tu boda se vea tal como lo soñaste. Por ejemplo, para la decoración quieres paredes inmensas de flores naturales alrededor de todo el salón, que sean de madera e iluminadas. En lugar de que estés llamando a preguntar a mil proveedores si pueden hacer esto, el wedding planner va a saber exactamente quién está en capacidad de hacer eso. Valor real: menos desgaste, estrés y tiempo dedicado a buscar algo que añoras para tu gran día.
¡No dejen de leernos cada semana! Y espero haber aportado con un granito de arena para que todas las parejas que van a dar el sí quiero, aprecien el valor de contar con un wedding planner el día de su boda.
