Literal. En la Mitad del Mundo. No cerca, no a lado, ahí. Justo donde está nuestro icónico monumento y por donde cruza la línea equinoccial.
Esta fue una boda destino que unió a Ecuador con Colombia. Empezamos la planificación 6 meses antes de la fecha, con toda la ilusión y las ganas de hacer de esta boda, una reunión inolvidable.
Tuvimos dos opciones para elegir el lugar: un hotel en las afueras de Quito o atrevernos a hacerla en la Mitad del Mundo. Fui la más feliz cuando me plantearon esta opción, porque como deben haber visto, hacer bodas en lugares no convencionales es de mis cosas favoritas.
Hicimos una vista de inspección a la Ciudad Mitad del Mundo antes de tomar la decisión. Caminamos por sus diferentes espacios, conocimos su hotel boutique, visitamos su capilla y empezamos a imaginar las muchas posibilidades del lugar. La plaza central fue el lugar elegido para la recepción, la ceremonia en la capilla y el cocktail hour en el Hotel Boutique Mitad del Mundo.
En los meses siguientes fuimos armando paso a paso, detalle a detalle, lo que Pía y Diego imaginaban para su boda. El catering, el concepto, la torta, los dulces, el licor, y cómo no, los servicios necesarios para que familia y amigos que viajaban a la boda, se sientan como en casa.
El fin de semana empezó con un City Tour por el centro de Quito por la mañana. Por la noche, arrancaron las celebraciones con un Welcome Cocktail. Aquí tuvimos la primera sorpresa, una serenata con mariachis para Pía de parte de su pronto, flamante esposo. Canciones preparadas especialmente para ella fueron la cereza del pastel de esa noche, que fue de risas y cariño sincero.
A la mañana siguiente, mañana de boda, las cosas empezaron desde muy temprano. Amigos y familiares llegaron a la Mitad del Mundo donde teníamos organizado el servicio de maquillaje y peinado para las chicas, de la mano de Gaby Pérez y su equipo, y un tour guiado por la Ciudad Mitad del Mundo, para los chicos. Mientras avanzaba la mañana, avanzamos con los últimos preparativos y detalles, de tal forma que cuando el parque abrió sus puertas, estábamos con todo el montaje a punto.
El getting ready de los novios incluyó una mini sesión de fotos con sus famiias, incluido un first look entre Pía y sus papás, y la entrega de un regalo especial a Diego de parte de su futura esposa. Fueron un momentos hermosos!
La ceremonia empezó con todos los invitados dentro de la capilla, mientras Pía avanzaba sola por unos metros, para encontrarse luego con su papá y entrar juntos. Fue un pedido expreso de la novia, como también lo fue la ubicación de sus padres en la iglesia.
Fue una ceremonia de emociones intensas, especialmente cuando los novios leyeron sus votos y también, por quien ofició la ceremonia, que es amigo muy cercano de la familia del novio y viajó desde Colombia especialmente para estar presente en este día. Terminada la ceremonia, los invitados pasaron al jardín central del Hotel Boutique Mitad del Mundo, para la hora del cóctel, donde también pudieron dejar sus consejos para los novios.
La recepción inició alrededor de las 14h30, cuando Pía y Diego ingresaron al área de carpas de la mano, con el ramo de novia encendido y dos botellas de champagne para llenar su torre de copas. ¡Fue toda una entrada!
El menú espectacular, resaltando sabores ecuatorianos y un servicio impecable estuvo a cargo de Fiatri. Tuvimos capitanes de mesa con el mejor aguardiente colombiano, y vasitos de shots hecho en cerámica para cada invitado, diseñados especialmente para los novios en Ráquira, la capital artesanal colombiana. Terminado el almuerzo, los novios abrieron pista con su first dance, pirotecnia fría y la mejor onda para celebrar este día en grande.
La parte dulce no podía faltar, por lo que tuvimos una mezcla de dulces para todo gusto: donuts, galletas, mini shots, y la torta infaltable, que la cortaron cuando ya Pía estuvo con su segundo look, súper fresco y relajado. Sólo miren las fotos.
Terminamos la noche con la mejor vibra, con invitados felices, novios dichosos y listos para iniciar nuevos proyectos y aventuras juntos.
Fue todo un privilegio formar parte de esta boda, gracias de corazón Pía y Diego por abrirme las puertas y compartir con ustedes este pedacito de su vida. Los llevo en el corazón.
Y no puede faltar la mención especial a Vale y Oscar, y el equipo de One Shoot, los responsables de las hermosas fotos de ese día. No dejen de seguirlos!
Venue: Ciudad Mitad del Mundo y Hotel Boutique Mitad del Mundo
Catering & Deco: Fiatri Eventos
Torta: Zucker
Hair & Makeup: Gabriela Pérez
Invitaciones: Tarjetitas
Fotografía & Video: One Shoot
Licores: Laguarda Vinos & Espirituosos
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