Este es un tema sobre el que toda pareja debe poder conversar abiertamente, sin tapujos ni miedos, y en todas las etapas de la relación. El tema financiero es realmente, un tema. Y son pocas las ocasiones o las oportunidades que nos damos como pareja para aprender sobre el manejo financiero de nuestra familia, indagar qué alternativas tenemos, aprender a organizar nuestros ingresos y gastos, mantener un presupuesto. Con el día a día, el tema financiero queda relegado y sólo se lo toca cuando hay problemas. ¡Qué distinto sería si hablásemos y aprendiésemos más sobre este tema!
Por eso, hoy les comparto 5 tips financieros para parejas.
Encuentren la mejor manera de combinar las finanzas con tu pareja
No hay una sola fórmula correcta para hacerlo, cada pareja tiene la suya y puede ir cambiando con el paso del tiempo y de sus circunstancias de vida.
Algunos expertos recomiendan que cada integrante mantenga su cuenta bancaria y tengan una cuenta adicional, que sea la conjunta. Así se mantiene la idea de la tuya, la mía y la nuestra. Esto no significa que no ames y confíes en tu pareja, sino que te da un sentimiento de independencia financiera que es bastante sano, sobre todo al iniciar la vida en pareja. La cuenta “nuestra” sirve para el arriendo, préstamos de vivienda, mantenimientos, incluso vacaciones.
Determinen objetivos a corto y largo plazo
Tener objetivos financieros ayuda a que te quedes en el camino correcto y mantiene a la pareja responsable de sus acciones. Objetivos a corto plazo pueden ser comprar o cambiar de electrodomésticos, mejoras en su casa o incrementar su fondo de emergencias. En cambio, los objetivos a largo plazo pueden incluir cosas como compra de una casa, ahorros para su retiro o su planificación familiar.
Una forma fácil de empezar con esto es sentarse un momento con tu pareja y que cada uno escriba sus objetivos financieros. Luego categorízalos de más a menos importantes y finalmente, ponles una fecha en la cual vayan a cumplir este objetivo. Vuelve a ordenarlos de la fecha más próxima a la más lejana y tendrás tu lista de objetivos lista, con prioridades y fechas de cumplimiento.
Evalúen y cataloguen sus objetivos cada año, para hacer un seguimiento y asegurarse de que ambos estén en la misma página.
Armen un presupuesto que les otorgue cierto nivel de independencia financiera:
No importa el nivel de sus ingresos, todas las parejas se benefician de tener armado un presupuesto, esto les permite cumplir más rápido sus objetivos financieros. Para esto, necesitan saber exactamente sus ingresos y egresos mensuales, para que sepan en qué se va su dinero.
Existe una regla de presupuesto llamada “50/30/20” que es una buena forma de empezar. Esto quiere decir que 50% de sus ingresos debe estar destinado a sus necesidades: arriendo, alimentación, agua, luz, internet, seguro del carro. El 30% va a sus deseos: hobbies, compras, salidas a comer, diversión; y el 20% va para sus ahorros. De esta forma destinan un rubro fijo para los ahorros en lugar de pensar “ahorro lo que me queda”.
Esta regla les da cierta flexibilidad ya que tienen un 30% (15% cada uno) de sus ingresos para sus deseos y cada uno decide a qué lo va a destinar. Tener esta independencia financiera en la pareja es importante para mantener la individualidad en la que toda relación sana, se afirma.
Se abierto y transparente con tu pareja
La mejor forma de evitar conflictos financieros es evitando los malentendidos financieros; esto se logra siendo transparentes y hablando abiertamente, sin dramas, sobre su presupuesto y sus proyectos. Si acordaron manejarse con un presupuesto, déjale saber a tu pareja que estás comprometido con esto porque es un proyecto que armaron juntos. Hablen de dinero de forma natural en su día a día, que no sea un tema cerrado.
Eviten la llamada “fricción financiera”, ese sentimiento de no querer hablar del tema porque no saben cómo hacerlo ni cómo va a reaccionar su pareja con tal o cual situación. Si por alguna razón tus ingresos en un mes bajaron, tuvieron que hacer un viaje inesperado o se te está haciendo difícil cumplir con tu parte del presupuesto familiar acordado, no esperen mucho para hablarlo y ponerlo sobre la mesa. Cultiven el hábito de hablar del dinero frecuentemente, no sólo a fin de mes cuando hay que pagar las facturas.
Recuerda que están en el mismo equipo
No tiene sentido ocultarle cosas a tu pareja cuando hablamos de finanzas. Inevitablemente las cosas escondidas van a salir a la luz, sobre todo cuando realicen sus declaraciones de impuestos. Las finanzas de pareja son un esfuerzo en equipo: si trabajan juntos, ganan juntos. Recuerden que esto no es una competencia, es una oportunidad de construir algo mejor para los dos.
Las reglas pueden cambiar, de igual manera que las relaciones cambian y evolucionan. Si quieren llegar más rápido a sus objetivos, busquen alternativas juntos. Planifiquen objetivos positivos para que ambos se esfuercen y ahorren juntos.
Comments